TECNOLOGIA DE PUNTA

La tecnología es un término griego compuesto por los palabras tekne (“arte”, “técnica”) y logotipos (“conjunto de saberes”). La palabra se emplea para dar nombre a los conocimientos que dejan fabricar objetos y alterar el ambiente. La noción supone la puesta en práctica del conocimiento científico para satisfacer las necesidades humanas.

QUE ES LA TECNOLOGIA DE PUNTA.

La tecnología de punta hace referencia a toda tecnología que fue desarrollada muy recientemente y que es de avanzada (o sea, que supone un adelanto o algo innovador con respecto a los productos ya existentes)

La tecnología de punta comienza con investigaciones en laboratorios, donde se desarrollan los primeros prototipos. Una vez probado su funcionamiento, los productos ya se encuentran listos para ser ofrecidos en el mercado.

 

Por norma general, las creaciones tecnológicas primero se lanzan al mercado a costes altísimos, los cuales descienden gradualmente, conforme las compañías empiezan a recobrar sus inversiones.

Es esencial tener en cuenta que la idea de tecnología de punta refiere como mucho avanzado que existe en un determinado instante. Con el avance del tiempo, los productos dejan de ser innovadores y se vuelven obsoletos, siendo sustituidos por otros. Estos nuevos productos son los que van a contar, por un tiempo, con la denominación de tecnología de punta.

Este concepto, en suma, está asociado al de vanguardia. Es aquello que se halla en la primera situación o bien en el punto más avanzado, adelantado a el resto.

 

TELEFONIA MOVIL

 

Por ejemplo, en el campo de la telefonía móvil, los dispositivos que hoy disponen de tecnología de punta son aquéllos con pantalla táctil, conexión a Internet, cámaras fotográficas con buena resolución y la posibilidad de reproducir música y vídeos, entre otras características.

Es importante tener en cuenta que la idea de tecnología de punta refiere a lo más avanzado que existe en un determinado instante.

 

Con el avance del tiempo, los productos dejan de ser renovadores y se vuelven obsoletos, siendo reemplazados por otros. Estos nuevos productos son los que van a contar, por un tiempo, con la denominación de tecnología de punta.

Este término, en definitiva, está asociado al de vanguardia. Es aquello que se encuentra en la primera situación o bien en el punto más avanzado, adelantado a el resto. Por ejemplo, en el campo de la telefonía móvil, los dispositivos que el día de hoy disponen de tecnología de punta son aquéllos con pantalla táctil, conexión a Internet, cámaras fotográficas con buena resolución y la posibilidad de reproducir música y vídeos, entre otras peculiaridades.

No obstante, se trata de una idea poco clara para el consumidor, quien por norma general no domina los tecnicismos necesarios para comprender qué hay detrás de una tecnología en particular.

 

Al contrario, el mercado juega con él de forma lamentable, llevándolo a creer que un determinado producto es superior al resto por razones que están tan lejos de la verdad como la persona de comprender a qué se refieren. De esta manera las compañías congregan masas de gente a sus alrededores, aprovechándose de esa búsqueda de seguridad que nos lleva a continuar a un líder, tan propia del ser humano.

A menudo se cree que un dispositivo cuenta con tecnología de punta si los números que lo identifican son más altos que los de la competencia.

 

Un ejemplo común es la confusión que existe en torno a los procesadores y sus velocidades; un gran porcentaje de personas se inclina a meditar que uno que alcanza tres.1GHz es más rápido que uno cuyo encuentre sea 1.6GHz.

 

Es ese el punto en el que el público general deja en evidencia su falta de formación técnica; esto no es negativo en sí mismo, en tanto que cada uno tiene la libertad de especializarse en el campo del conocimiento que más le interese, pero el problema se da cuando alguien opina sobre un tema que no entiende.

Si tecnología de punta es mayor velocidad, entonces se deja de lado el punto principal: qué tareas es capaz de realizar un procesador en cada ciclo y de qué forma.

 

Buscando poner todo esto en términos claros y gráficos, supongamos que existe un dispositivo cuyo objetivo es pasar manzanas de un cajón a otro. Uno de los modelos libres en el mercado, asegura llegar a tres movimientos por minuto, mientras que su competencia hace alardes de lograr el doble.

 

No obstante, lo que la mayoría de los usuarios no llegaría a saber, es que el primero es capaz de trasladar 3 unidades por vez, al tiempo que el segundo, tan sólo uno Así, el rendimiento sería de noventa contra sesenta por minuto, alterando drásticamente el cuadro.